A estas alturas del curso, ya tengo que ir planteándome el montaje de piezas en el Lámbor. Tengo mucho material terminado y disponible para montar, aunque siempre hay flecos por rematar. Mi intención es llevar el coche al elevador después de Semana Santa, en el mes de abril, ya que tendré más tiempo disponible. Pero para entonces debo tener listo todo lo que vaya a montar, porque se trata de llevarlo al elevador para montarlo todo lo más rápido posible.
Hace poco me di cuenta de que, por ejemplo, antes de nada tendría que montar el depósito de gasolina y todas las piezas que van asociadas a él. Y de esto no he hecho nada. Me gustaría darle una capa protectora al depósito (a falta de antigravilla) y tengo que comprar un aforador nuevo, además de preparar otras piezas.
Lo siguiente será montar la suspensión trasera, algo que adivino complicado, porque para montar las barras de torsión necesitaré un útil para comprimir los brazos hacia arriba (el manual habla de unas varillas roscadas). Por otro lado, creo que montaré los amortiguadores originales. Y me gustaría proteger las barras de torsión.
Después montaré el sistema de frenado, del que lo tengo todo listo, excepto un par de latiguillos de freno muy largos que tengo que limpiar y siempre voy dejando. Y otra cosa será purgar el circuito, ya que tengo que llenarlo de líquido de frenos al completo. No he encontrado ninguna explicación de cómo hacerlo paso a paso. Y no debo olvidar el pedal de freno, que tengo que revisar.
En la suspensión delantera también lo tengo todo listo, aunque me lamento de no haber pintado las manguetas y pinzas de freno. Se van a oxidar enseguida (de hecho, ya están empezando).
La dirección también está lista.
El conjunto caja-motor tendré que meterlo en el vano motor tras montar determinados componentes, ya que luego no tendría acceso. Esto también lo haré este mes, además de dejar unidos ambos elementos, ya que están casi listos.
Tras el montaje de todo en el elevador, vendrá la fase de terminación, ajuste, pruebas... Esto va a ser largo también, ya que surgirán mil y un problemas que ahora mismo ni me puedo imaginar. Es algo normal y previsible.
Si todo va dentro de lo esperado, debería tener el coche listo para moverlo allá por el mes de junio. Veremos...
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