Hoy he estado haciendo diferentes cosas. Ninguna ha sido muy vistosa, pero se trata de pequeños trabajos necesarios para poder avanzar próximamente.
En primer lugar, he estado revisando y organizando diferentes piezas que voy a tener que montar junto con el salpicadero.
Se trata de las guanteras y diferentes piezas de plástico que van junto al salpicadero. Todas estas piezas tienen que limpiarse y no sé si pintaré alguna para mejorar su aspecto.
Respecto a las guanteras, estuve decidiendo cuál montar, ya que tengo las originales, otras de segunda mano y las del R5 GTL. De éste último sólo tenía aprovechable la del piloto, ya que la del copiloto estaba agujereada por el montaje de un altavoz.
Después de compararlas, decidí que era mejor aprovechar las originales y arreglar los desperfectos que tienen, ya que ni siquiera quedarán visibles. Las otras, por unas cosas u otras, no me convencían del todo. Además, siempre prefiero dejar piezas originales que cambiarlas.
Desmonté los altavoces de las originales, una de las cosas por las que no quería reutilizarlas, y resultó que la marca que dejaban era apenas un orificio, ya que iban sujetos con un único tornillo en la parte central.
La del piloto tiene un par de roturas de los ratones, pero creo que podré repararlos, al igual que los orificios pequeños de los tornillos de altavoces.
Recorté un trozo de una de las guanteras para tener material para tapar dichos huecos:
Las piezas originales de plástico negro que van a los lados del salpicadero estaban rotas en un extremo, así que utilizaré las del R5 GTL.
La tapa de la caja de fusibles original es de un plástico brillante, mientras que la del R5 GTL es de un plástico de menor calidad y sin brillo:
Utilizaré la original, aunque tiene algún desperfecto.
Estuve revisando el montaje de la carcasa de la palanca de cambios. Cuando la desmonté, descubrí que lleva en su interior una lámpara que ilumina el selector, pero ahora no sé dónde está. De todas formas, tenía un portalámparas del antiguo indicador de temperatura que tenía montado en el centro del salpicadero y que me serviría. Lo que no encontré fueron los cables que se supone alimentan dicha lámpara. Tendré que realizar la instalación, aunque no descarto descubrirlos cuando coloque todo el cableado del salpicadero.
Precisamente el cableado del salpicadero fue otra cosa que estuve analizando. Conecté la batería y comprobé el funcionamiento de las diferentes lámparas de alumbrado interior. Probé el plafón del que tenía montado el cableado (el derecho) y funcionaba, apagándose si presionaba el pulsador de la puerta. Sin embargo, esto lo hacía en ambas posiciones de la tulipa, que bascula para que la lámpara se quede encendida permanentemente o sólo mientras la puerta esté abierta. Así que tendría que revisarlo.
También
estuve probando la iluminación del cuadro, y no funcionaba. Comprobé
las lámparas y estaban bien. Pero no se encendían al poner el alumbrado
de posición del coche. Los fusibles están todos bien, así que tendré que
investigar.
La
que sí recibía positivo era la lámpara de alumbrado de los mandos de
calefacción. Aunque debo reparar el cableado y colocar los terminales.
Los originales estaban en mal estado, pero recuperé los del R5 GTL, que
serán los que instale.
Respecto
a la consola, tengo pendiente montar el mechero. Tengo el original (que
estaba roto) y unos cuantos más similares con los que intentaré
repararlo aprovechando diversas piezas. También tengo que reparar el cableado del conector.
Esto
de no haber reparado el cableado del salpicadero antes ha sido un
error. No lo hice porque no sabía qué longitud darle a los cables y
prefería tenerlo presentado para saberlo con seguridad. Pero ahora
tendré que trabajar dentro del coche, con la incomodidad y dificultad
que esto conlleva.
Estuve
analizando también qué hacer con la moqueta. Llegué a la conclusión de
que lo mejor sería hacerla en varios trozos (como era originalmente), no
de una pieza. No merece la pena unir los dos trozos delanteros, ya que
en medio queda la carcasa de la palanca de cambios, que las sujetará al
quedar montada. Además, esto tiene la ventaja de poder trabajar por
separado y que si una pieza queda mal, se puede repetir sin afectar a la
otra.
