jueves, 30 de enero de 2014

Empezando con el cableado

Hoy he desmontado la guantera de la derecha para terminar de vaciar toda la zona del salpicadero y así limpiar mejor todas esas piezas. Estaba sujeta con dos tornillos rosca-chapa a la derecha y un tornillo con tuerca a la izquierda que la fijaba a una chapita similar a la que hay en el lado del conductor para apoyar la caja de fusibles. Creo que ese tornillo no es el original, ya que es totalmente distinto a todos los demás que he quitado en esa zona. Seguramente lo sustituyeron cuando montaron los altavoces (que no voy a mantener). Al intentar aflojarlo (estaba totalmente agarrotado), se partió, así que ya que tengo que poner otro, intentaré poner uno rosca-chapa.


Al salir la guantera, cayó de todo... Los ratones se han dedicado a formar nidos con el material de los paneles aislantes del fondo del habitáculo, por lo que los han destrozado y han acumulado esos restos por todos los rincones, junto con restos de comida, huesos de distintos frutos, etc. Ahora tendré que encontrar un material similar para sustituir los paneles viejos, ya que ese material es el responsable de aislar el habitáculo de gran parte del ruido del motor.


Me puse a limpiar todo el suelo con un cepillo. Es la primera vez que barro un coche...


Después de hacer una limpieza superficial de toda la suciedad procedente de desmontar el salpicadero completo, me puse a revisar el cableado. Preparé una serie de tramos de cable con fichas de empalme en los extremos que utilizaría para empalmar cada cable de manera provisional.


Estuve conectando los cables cuyos extremos eran claramente identificables. Sólo quedaron tres cables de color verde que al ser similares, no sabía qué extremo iba con cuál.

miércoles, 29 de enero de 2014

¡¡¡Salpicadero fuera!!!

Hoy he seguido con la tarea de desmontar el salpicadero. Tenía el problema de averiguar cómo estaba sujeto, ya que no veía tornillos ni cogidas por ninguna parte. Lo que estaba claro es que primero tenía que quitar el marco del cuadro de instrumentos y el propio cuadro. Para ello, desconecté los interruptores de la izquierda.

Me daba mucho miedo tirar porque podría romper cualquier cosa. Las piezas son de plástico, muy viejas y han pasado muchas horas al sol, por lo que podrían partirse las grapas o cogidas que tuviesen. Tras tantear un poco, decidí probar a tirar con cuidado de un lateral del marco del cuadro de instrumentos... Y salió con un sonido muy doloroso... pero sin romper nada. Después tiré del lado contrario y el marco salió al completo.


El cuadro de intrumentos tenía dos láminas metálicas a los lados. La de la izquierda estaba más a la vista y se podía presionar fácilmente para liberar el cuadro de ese lado. Pero la de la derecha estaba más escondida y costó más trabajo presionarla. Finalmente logré soltar ambas y tirar del cuadro hacia fuera. Sólo pude separarlo un poco, ya que el cable del velocímetro me impedía sacarlo más. Me fui al cofre motor y busqué la conexión del cable en la caja de cambios. El cable estaba sujeto mediante un clip. Tuve que pedirle ayuda a "El Yuyu" para soltarlo, porque yo ni con unos alicates pude... Él lo hizo con las manos...


Con el cable suelto, pude sacar el cuadro más hacia fuera para soltar los dos conectores eléctricos. De nuevo "El Yuyu" me ayudó a soltar el cable del velocímetro del cuadro. Es muy simple: hay que presionar en dos laterales de manera que los otros dos se separen y suelten las pestañas que lo sujetan al cuadro por detrás. Y con esto, tenemos el cuadro fuera.


Con el cuadro fuera, busqué alguna sujeción del salpicadero y encontré una pestaña en la parte de abajo. Al presionarla, el salpicadero se soltó de esa zona. Al tirar un poco de la parte de arriba, también se soltaron fácilmente las cogidas superiores. el salpicadero ya estaba saliendo.

Me fui al lado derecho y encontré otra pestaña en la parte inferior que al presionarla hizo la misma función que la otra. Sin embargo, de arriba el salpicadero no se separó tan fácilmente. Necesitaba soltarlo también de la parte central, donde estaban las rejillas de ventilación (que saqué hace unos días) en la parte superior, y los mandos de la ventilación en la parte intermedia. Debajo estaba el mueble de la radio.

Con la rejilla de ventilación fuera pude acceder a los cables Bowden de las ruletas de mando. Los solté con ayuda de un destornillador (van a presión sobre unos tetones) y los saqué de unas pestañas metálicas donde iban sujetos. De este modo, el mueble de los mandos quedó suelto y pude sacarlo tirando hacia fuera sin problemas.


Al sacar el mueble, salió porquería a más no poder... Era uno de los motivos por los que me animé a desmontar el salpicadero: limpiarlo todo en condiciones. Creo que esa zona era una buena casita para los ratones de campo...

Con esa pieza fuera, pude acceder a un tornillo que sujetaba el salpicadero por la zona central. Una vez quitado el tornillo, el sapicadero salió tirando de la parte superior y liberando las grapas.


Sólo quedaba desconectar un cable de masa en uno de los tornillos de la rejilla de ventilación central. También había un cable rojo que entraba por esa rejilla hacia el motor. Se trataba de uno de los cables del reloj de temperatura, que iba al sensor situado en el bloque. Desconecté todos los conectores y cables para poder separar definitivamente el salpicadero.


El estado del salpicadero no es excelente. Por delante tiene algunas marcas y manchas que no sé si saldrán o podrán disimularse. Al ser e color beige, todo se nota mucho más. Por la parte de atrás, está aún peor. Las gomas aislantes están muy estropeadas y no sé si sabré repararlas o sustituirlas.







sábado, 25 de enero de 2014

Comienzo a desmontar el salpicadero

He querido empezar a desmontar el salpicadero, pero no es tan sencillo. No veía ningún tornillo de sujeción y no tenía ni idea de cómo extraerlo. Lo único que pude hacer fue extraer los 4 interruptores del lateral izquierdo (salen simplemente tirando) y la parte superior del mueble central, la zona de las rejillas de ventilación. Me dio la sensación de que se partía alguna patilla, pero me extraña, ya que todo parecía en su sitio una vez fuera.

 




Desmontaje del pomo de la caja de cambios

He pensado que era mejor, a pesar de mi reticencia a hacerlo, desmontar el salpicadero para poder limpiar todo mejor y eliminar esos olores que tiene el coche. En esa línea, me puse a desmontar la cubierta y el pomo de la palanca de cambios. Tuve que quitar dos tornillos que sujetaban por detrás la cubierta de plástico del conjunto, otros dos que iban al soporte de plástico de la palanca y un quinto que había en el frontal, bajo el alojamiento de la radio.

Una vez hecho esto, la carcasa no salía. Había que desmontar el pomo, que lleva dos pequeños tornillos de estrella. Con esto salen la parte delantera y trasera del pomo, pero no la central, que sale al quitar otro tornillo y su arandela, situados verticalmente sobre el eje de la palanca.


La carcasa está formada por una pieza principal que es la más grande y cubre casi toda la zona, una segunda pieza que cubre la parte superior y sirve de guía para el movimiento de la palanca, una pieza de metacrilato que lleva escritas las diferentes letras correspondientes a cada posición de la palanca y una lámina que sirve para destacar la marcha seleccionada. Esta lámina se desplaza impulsada por la palanca y sufre debido a este deslizamiento constante, así que estaba algo deteriorada, aunque no demasiado. Podría reforzarse, aunque no sé cómo hacerlo exactamente.



jueves, 23 de enero de 2014

¡¡¡Depósito de gasolina fuera!!!

Finalmente he descartado desmontar el tubo de escape, ya que no lo veo necesario por ahora. Es más bien una tarea posterior. Ahora mismo no merece la pena ponerse a restaurar el tubo ni a sustituir el silenciador trasero.

Respecto al desmontaje del depósito, esta mañana desconectamos el manguitos de ida hacia la bomba, el manguito de retorno y un conector eléctrico, todos ellos en el aforador, al que tuvimos acceso inclinando el depósito de la parte delantera.
 

También comprobamos que había un tornillo en la parte trasera que sujetaba el depósito y era imposible de aflojar, ya que la tuerca giraba loca. Para poder acceder a ella, había que desmontar el parachoques trasero, así que "El Yuyu" se puso manos a la obra. El parachoques estaba sujeto mediante 4 tornillos Torx, aunque uno de ellos había sido sustuido por uno de cabeza hexagonal normal y corriente. Dos de los tornillos Torx se pasaron al intentar aflojarlos, así que "El Yuyu" usó el destorgolpe, pero no había manera... Al final tuvo que usar la Dremel para hacerles una muesca y poder aflojarlos con el destorgolpe.


Cuando al fin salió el parachoques, "el Yuyu" y yo intentamos aflojar el tornillo metiendo una llave por unos huecos que había cerca, pero fue imposible acertar a meter la llave en la tuerca, ya que se trabajaba a ciegas y sin apenas espacio. Yo pensé que tras tantos intentos, podría estar ocurriendo que la tuerca estuviese muy pegada a la chapa y la llave no pudiese entrar. Así que "El Yuyu" volvió a ponerse con la Dremel a cortar la cabeza del tornillo. Ese tornillo, además, sirve de toma de masa para las luces traseras.


Pero ahí no terminaban los problemas. El depósito seguía sin salir porque el tubo de llenado seguía fijo. "El Yuyu" comprobó que la abrazadera podía aflojarse mucho más y logró dejarla completamente suelta. Pero aún así, la pieza de goma estaba muy rígida y no se aflojaba. Por lo tanto, teníamos que sacar el depósito con el tubo de llenado completo. Descubrimos que el extremo del tubo iba atornillado a la chapa en la propia boca de llenado. Quitando la tapa del depósito, podían verse 3 pequeños tornillos con cabeza Torx.


Pero eso no era todo... Había un manguito que unía el tubo de llenado con la parte superior del depósito. Es el tubo antidescarga que sirve para evitar un sobrellenado o que se alcance una sobrepresión con el calor. Lo desconectamos del depósito (del tubo no se podía) y al fin quedó libre el depósito y pudimos sacarlo. Una vez fuera, separamos la parte inicial de tubo de llenado junto el manguito de aireación.


Al sacar el depósito, notamos que había algo de gasolina en su interior. Claro, habíamos estado alimentando la bomba de gasolina desde una garrafa, pero el retorno de la bomba había estado enviando gasolina al depósito. Cogimos una garrafa vacía de aceite y la limpiamos para recuperar la gasolina. La llenamos y todavía había más... Cogimos otra garrafa y casi se llenó también. Por tanto, recuperamos unos 9 litros de gasolina. El motor no consumía tanto como pensábamos. Habría sido una barbaridad que en los intentos de arranque que se han hecho se hubiesen consumido 15€ de gasolina (unos 10 litros).

Llevamos a la zona del lavadero el depósito para limpiarlo por dentro. Desmonté el aforador. Antonio me explicó cómo hacerlo, ya que había visto desmontar otro similar: hay una chapa circular que hay que hacer girar con ayuda de un destornillador o algo similar y golpeándolo con un martillo. Cuando unas muescas de la chapa coinciden con unos huecos en el borde del soporte, el aforador puede salir hacia arriba. Hay que ir moviéndolo para lograr que salga el flotador.


El aforador está bastante deteriorado. Creo recordar que funcionaba mal en tiempos y al accionarlo, noté que ofrecía bastante resistencia. Además, tiene partido el contacto eléctrico del cable que va al indicador de nivel de carburante. Esto es reparable, pero creo que compraré uno nuevo, ya que es un componente difícil de desmontar y prefiero que se monte uno nuevo que no pueda dar problemas.

Metimos en el depósito varias tuercas y tornillos para después llenarlo con un par de litros de la gasolina que habíamos recuperado. Como este tipo de trabajos son ideales para Pedro, dejé que él se encargase de agitar este cóctel tan especial...


miércoles, 22 de enero de 2014

Intentando desmontar el tubo de escape y el depósito de gasolina.

Hoy hemos subido el Lambor en el elevador para intentar desmontar el depósito de gasolina. Hace unas semanas ya se había vaciado la poca gasolina que le quedaba. "El Bichi" estuvo quitando los tornillos de sujeción y, de repente, se quedó suelto y descolgado. Mala idea no haber puesto nada para sujetarlo... Pusimos un gato vertical para soportarlo y poder bajarlo con seguridad. Sin embargo, nos encontramos con que estaba sujeto al tubo de llenado con una abrazadera que no sabíamos cómo aflojar. Parecía no poder entrar ninguna llave ni ninguna herramienta, pero Antonio probó con una llave plana pequeña y logró aflojarla. Aun así, el tubo de goma superior parecía estar hinchado y no pudimos soltar el depósito.

 

Por otro lado, "El Yuyu" estuvo soltando las abrazaderas y sujeciones del tubo de escape y el silencioso trasero para sacarlos, pero no pudimos, ya que las uniones entre los distintos tramos estaban muy agarrotadas. Pedro estuvo dándole con el martillo (lo que le gusta un martillo...) al silencioso para intentar sacarlo, pero fue imposible. Le dejé liarse a martillazos porque el silencioso estaba de pena y habría que cambiarlo.