domingo, 30 de septiembre de 2018

Planificación del trabajo - Octubre 2018

Estos días he estado repasando todo lo que debería tener en cuenta a la hora de meter el motor en el coche y arrancarlo. Esto no supone mucho, ya que el objetivo sería arrancarlo sin más, sin dejarlo arrancado ni mover el coche. Simplemente ponerlo a punto, hacerlo girar y que se mantenga a ralentí.

Así que en los próximos días intentaré meterlo con ayuda (yo solo no puedo) para posteriormente ir conectando todo lo necesario, llenar de aceite el motor y la caja de cambios (no quiero que gire en seco) y probar a arrancarlo. No voy a montar el sistema de refirgeración, con lo que me ahorro montar radiador, manguitos, etc. Tampoco voy a conectar el escape ni el varillaje del acelerador, pues puedo accionar el carburador desde la propia palanca de la mariposa. Ni siquiera conectaré la llave de contacto, pues quiero arrancarlo con un pulsador externo para mayor comodidad.

Una vez que logre arrancar el motor y compruebe que no hay problemas, será el momento de hacerle un rodaje, montando el sistema de refrigeración y alguna cosa más si es necesario. Habrá que revisar si existen fugas, si las temperaturas se mantienen en valores correctos, etc.

El paso final será realizar una prueba de rodaje. Para ello tendré que montar dirección, revisar suspensión, llenar el circuito de frenos, montar el asiento del piloto, volante, etc.

Todo lo que quise haber hecho al final del curso pasado espero realizarlo durante este trimestre, antes de que acabe el año.

sábado, 29 de septiembre de 2018

Reparación de la pista de plástico de la palanca de cambios

La palanca de cambios tiene una pista de plástico cuya misión es indicar la marcha seleccionada. Para ello, se desplaza junto con la palanca, que la empuja adelante o atrás, y una zona destacada en naranja señala la letra correspondiente. Esta pista de plástico estaba algo deteriorada, con una zona rajada y, siendo imposible encontrarla nueva o en mejor estado, tendría que montarla de nuevo.

Pero se me ocurrió que para evitar que siguiese deteriorándose, podría reforzarla con una lámina transparente pegada por debajo. La corté siguiendo el contorno y haciendo el hueco interior:


Posteriormente me di cuenta de un error: hice un corte que creía llevaba la pista original por lo limpio que era y que tenía lógica para poder montar la pista con el eje de la palanca en el hueco interior, pero ese corte realmente no es necesario, ya que la pista podría montarse por arriba, desmontando el pomo, y seguramente se hizo ese corte por deterioro.

Pegué ambas piezas con silicona, uniendo distintas zonas progresivamente:


Quedó muy bien, pero con el defecto del corte que no debía tener. De todos modos, no creo que afecte a su funcionamiento, pero podría haberla dejado todavía mejor.

viernes, 28 de septiembre de 2018

Reparando el tapón del depósito del líquido de frenos

El tapón del depósito del líquido de frenos lleva una serie de piezas por debajo, que no son más que un flotador que se desliza hacia arriba cuando hay suficiente nivel de líquido. Si el nivel desciende, el flotador baja, y una arandela que tiene en la parte superior hace contacto entre los dos terminales, cerrándose el circuito a masa y encendiéndose el testigo de aviso en el cuadro de instrumentos.


Cuando desmonté el tapón del depósito del líquido de frenos, descubrí que no funcionaba bien, ya que el flotador no se desplazaba con facilidad, sino que se quedaba atascado. Era como si el eje del flotador fuese más ancho que el orificio por el que se tenía que desplazar. Tenía pensado comprar uno nuevo, pero quise probar a repararlo.

Lo primero fue desmontar los terminales, que salen deslizándolos hacia abajo:

El problema surgía a la hora de sacar el flotador, ya que el eje tiene un par de pestañas que impiden que la arandela se salga:


Intenté presionarlas con unos destornilladores pequeños, pero no había forma, ya que el eje se doblaba y podía partirse. La solución fue utilizar unos alicates pequeños, aunque no fue sencillo. Pero finalmente pude presionarlas y que la arandela saliese:


Con el flotador fuera, pensé lijarlo para reducir su diámetro, pero apenas retiraba material. Así que probé a darle con una de las muelas de la "dremel":


Sólo tenía que retirar material de dos laterales del eje, ya que no tenía forma circular, sino más bien ovalada, de ahí que se quedase atascado en según qué posición. Una vez que se deslizaba bien por el orificio, lijé el eje para eliminar rebabas.

Los terminales los limpié con cepillo metálico y tanto el flotador como el soporte de plástico los limpié con cepillo de dientes, agua y lavavajillas:


Volví a montar el conjunto de manera inversa y lo coloqué en el tapón:


La pena es que el tapón está amarillento y destaca mucho. Voy a ver si pruebo un método para blanquearlo.

Relojes Jaeger de temperatura, presión de aceite y tensión

A través de un grupo de Whatsapp, supe de la venta de una serie de relojes Jaeger que se pueden montar en el hueco de la consola del salpicadero. Este tipo de relojes se vendieron en su época y muchos Renault los llevaban como un "extra". Ahora se venden a precio de oro y alguna vez había pensado comprarlos, pero son caros y tampoco forman parte del equipamiento original del coche.

Sin embargo, al precio que se vendían en este caso, merecía la pena comprarlos. De hecho, compre uno de cada tipo: temperatura motor con presión de aceite y temperatura motor con voltímetro.


Viéndolos por detrás, parecen más modernos que los originales:


Lo malo es que para montarlos en el coche hay que romper la consola para pasar los cables por detrás del salpicadero. Una solución sería utilizar la consola original, que ya está rota y reservar la que compré de segunda mano para mantener el coche sin accesorios.

Limpiando la varilla de aceite de la caja de cambios

Si quería llenar la caja de cambios con la cantidad correcta de aceite, debería utilizar su varilla para comprobar el nivel. Como estaba bastante sucia, decidí limpiarla con un cepillo de dientes, agua y lavavajillas:



Quedó mucho mejor, aunque hubo algunos puntos negros que no pude eliminar. Son esos detalles que no puedo pasar por alto... Intentaré limpiarlos más adelante.

Ajustando la polea de la bomba de agua

Pensando que la desviación que sufría la polea al girar podría deberse a que la polea estaba un poco deteriorada en su centro, quise repasarla con la "dremel" para eliminar unas rebabas.


Quedó bastante mejor y al montarla (esta vez correctamente, con la polea pequeña delante), parece que giraba sin ninguna desviación.


Montando la palanca de cambios II

Con el pomo ya limpio, lo monté en la palanca y la dejé terminada, así que lo siguiente era montarla en el habitáculo.


Pero a la hora de encontrar los tornillos de sujeción, no daba con ellos. Tras buscarlos en diferentes sitios, al fin los encontré junto con los de sujeción de los asientos. La verdad es que tener un coche entero desmontado con sus diferentes piezas guardadas en tantos rincones, tiene su complejidad a la hora de localizar determinadas piezas. Ya me ha pasado varias veces. Y lo increíble es que no haya perdido nada aún...

Cuando fui a colocar la palanca, había dos tornillos colocados en unas roscas de sujeción de los asientos. Pero no eran los de los asientos, porque éstos estaban junto con los de la caja de cambios:


No tenía ni idea de qué podrían ser esos tornillos. Los guardé junto con los de los asientos, esperando descubrir de dónde son más adelante.

Los tornillos de sujeción de la palanca estaban muy bien conservados, así que los monté tal y como los encontré:


Dejé la palanca en la posición "P", ya que así estaba cuando desmonté la varilla que conecta con la caja de cambios.

jueves, 27 de septiembre de 2018

Limpiando el pomo de la palanca de cambios

Me llevé el pomo de la palanca de cambios a casa para limpiarlo con tranquilidad. Y es que el logo de Renault estaba sucio, y era una pena que se viese así.





Le di con un cepillo de dientes y agua con lavavajillas, para no ser muy agresivo. Pero fue agresivo:




La zona alrededor del logo perdió todo el brillo y se quedó arañada y mate... ¿Pero qué había hecho? ¿Cómo era posible que un simple cepillo de dientes con lavavajillas hiciese eso? Pensé que quizás el lavavajillas, que yo siempre he creído que es neutro, contiene algún producto agresivo. También pensé que a lo mejor ya en su momento limpié esa pieza y apliqué el producto renovador de plásticos, por lo que ahora lo que hice fue retirarlo.

Le di con un producto protector de plásticos, pero no mejoró. Finalmente probé a darle con el producto renovador de plásticos que tengo (Black Again) y quedó bien:


Lo que no sé es cuánto aguantará con este aspecto.

Montando la polea de la bomba de agua

Quise ver cómo quedaba la polea de la bomba de agua ya montada. Consta de dos piezas, junto con una arandela de sujeción, todo ello sujeto mediante tres tornillos al eje de la bomba.


Al girar la polea mirándola desde arriba, se podía apreciar que no asentaba bien, pues tenía una leve inclinación que hacía que la garganta no quedase alineada con la polea del árbol de levas ni con el tensor.


Tendría que revisar las piezas. Y es que las dos piezas de la polea tienen el centro dañado, con rebabas, fruto de algún desajuste. No sé si será reparable. Ya había buscado antes una polea nueva para sustituirla, pero no hay nada. Las que se venden son otros modelos, para variar...

También aproveché para montar el contactor FAE 35080, que roscaba perfectamente:


Más tarde, viendo fotos del desmontaje del motor, me di cuenta de que había montado mal la polea:


Como puede verse, la polea pequeña va delante de la grande, por lo que había montado las piezas al revés. No sé si esto influye en que asienten mal. Tendré que comprobarlo.

Montando la palanca de cambios

Montar la palanca de cambios no era complicado. Simplemente engrasé las zonas de contacto entre el eje de la palanca y el soporte, coloqué las piezas de espuma y cerré el conjunto con la tuerca y arandela superiores.


martes, 25 de septiembre de 2018

Tornillos del travesaño frontal

Cuando meta el motor en el vano, debo sujetar la caja de cambios al travesaño frontal, que deberá ir atornillado al chasis. Así que tenía que preparar la tornillería correspondiente. Había decidido sustituir tornillos, tuercas y arandelas por piezas nuevas que compré en su día. Recuperé la tornillería original (que tenía pintada) y busqué las piezas nuevas equivalentes:


Me extrañaba que sólo hubiese cuatro tornillos cuando en el travesaño existen seis orificios de sujeción, pero pude comprobar en las fotos del desmontaje que el travesaño va sujeto por cuatro tornillos (aunque existen marcas en los dos orificios restantes...):


Entre las arandelas y las piezas colocaría las arandelas de goma que fabriqué en su momento.


Montando la bomba de agua

Antes de montar la bomba de agua, no sabía si utilizar formador de juntas para evitar fugas. Sería una pena tener que desmontar tras arrancar el motor debido a un mal sellado de la unión entre bomba y culata. Sin embargo, la junta se veía bastante gruesa y no parecía que fuese a dar problemas. Le pregunté a Javier y me dijo que si las superficies estaban limpias y lisas, no era necesario aplicar formador de juntas. Así que decidí montar la bomba sólo con su junta.


La bomba va sujeta con 6 tornillos, dos más largos (en la parte superior) y cuatro más cortos, que ya pinté en su momento.


Además de montar el termocontacto adecuado, tendré que puentear la salida y entrada de líquido hacia el radiador de calefacción, así como los que van hacia la base del carburador, ya que no tengo previsto montar esos manguitos todavía.

Enderezando la tapa de balancines

Como ya descubrí antes del verano, la tapa de balancines estaba deformada, de manera que su junta se escapaba del alojamiento con la consiguiente pérdida de estanqueidad. Ya en su momento intenté enderezarla, pero no quedó bien del todo. Además, hoy Luis me hizo ver otro defecto: la zona de asiento de las tuercas de sujeción estaban hundidas...


Efectivamente, ante una posible pérdida de aceite por la junta, algún mecánico decidió apretarla como si de una culata se tratase, clavando las tuercas y, posiblemente, deformando de este modo la tapa por el lateral. Trabajo fino, sin duda.

Me fijé en la tapa de balancines del R5 GTL:


Parecía estar algo hundida, pero no estaba deformada por el lateral. Entonces, me fijé en la tapa del R4:


En este caso estaba perfecta... Los puntos de asiento de las tuercas estaban en su sitio, sin el más mínimo hundimiento. Ojalá pudiese aprovecharla. Pero la tapa de balancines de mi motor también es exclusiva y difícil de encontrar. La pondría nueva de buena gana si la encontrase. O compraría una de segunda mano en buen estado, si la encontrase...

Desmonté la tapa y la coloqué en un tornillo de banco para volver a apretarla por los laterales, esta vez sin miramientos hasta que noté que crujía. El rsultado fue que el lado deformado quedó bastante mejor, pero el lateral que estaba plano, quedó algo doblado hacia dentro. Bueno, esto no tenía mucha importancia, ya que en todo caso la junta quedaría apoyada en la culata, y no fuera. Aun así, lo intenté llevar a su forma como pude.

Respecto a los apoyos de las tuercas, golpeé la tapa de dentro hacia fuera con ayuda de distintas piezas (vasos y manerales de carraca) hasta dejarlos un poco mejor de lo que estaban.

Tras montar la tapa en su lugar, pude comprobar que el borde deformado quedaba casi en su sitio y que las tuercas asentaban decentemente.