Hoy he comenzado a estañar los extremos de los cables del interior del habitáculo que estaban cortados y tenía unidos mediante fichas de empalme. Al poco de empezar, me he dado cuenta de que no era una buena idea estañar las puntas para después intentar unirlas con el calor del soldador, ya que era muy complicado mantener ambos extremos unidos firmemente mientras se aplica calor y estaño a la vez. Hice el intento con un cable, pero tuve que entrelazar ambas puntas para mantenerlas unidas. Después se estaña y se cubre con fundas termorretráctil.
Así que a partir de ahí, lo que hice fue realizar la unión de los
extremos de cobre, con mayor longitud de cable sin aislante para poder
unirlos mejor. Este tipo de empalme se denomina "en prolongación" y se
realiza colocando ambos extremos formando 90 grados. Entonces se enrolla
un extremo alrededor del contrario y viceversa, de manera que ambos
cables quedan abrazando al otro. Ya de por sí es una unión muy firme y
casi del mismo grosor que el propio cable. Si, además, se estaña y se
cubre con funda termorretráctil, queda una unión con total garantía y
muy limpia.
Tuve suerte con el cable que parecía más complicado de reparar, el que estaba cortado muy a ras del final del mazo. Y es que no iba hacia la zona del motor, sino hacia la zona trasera, a lo largo de otro mazo, así que pude recuperar parte del cable descintando el mazo para soldarlo.
Esta mañana llegaron los cepillos metálicos que pedí para la "Dremel". Espero utilizarlos para tareas de limpieza y restauración de piezas pequeñas y medianas de metal.
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