viernes, 15 de junio de 2018

Montaje de la suspensión trasera (otra vez)

Con ayuda de Paco, me puse a montar los brazos traseros. Nada más montarlos, ya nos dimos cuenta de que había algo mal. El brazo izquierdo, en el que había montado el soporte nuevo, quedaba más bajo que el derecho (antes estaba más alto). Pero es que estaba bastante más bajo... Mientras en el derecho el eje de la rueda quedaba a 35cm del borde de la aleta, en el izquierdo quedaba a 39cm... Sorprendentemente, mis cálculos habían fallado. O quizás el montaje no fue adecuado. No lo sé.

Lo primero que se me ocurrió fue desmontar el brazo e intentar girar el soporte sobre el propio brazo, como sucedió al desmontar el soporte anterior. Lo sujetamos en un tornillo de banco e intentamos girar el brazo, pero no logramos moverlo nada. Estaba mucho más sujeto que el otro. Puede que fuese por estar la goma sin romper, que es lo que yo creo.

Así que volvimos a montar el brazo para ver si se podía mejorar la situación al montar las barras de torsión. El brazo derecho lo bajé con ayuda del útil hasta llegar a los 590mm ya conocidos entre puntos de sujeción del amortiguador. La barra encajó en el estriado. En el caso del brazo izquierdo, la distancia entre esos puntos ya era de unos 600mm, así que probamos a montar la barra en esa posición. Montamos las ruedas y los amortiguadores y al bajar el elevador, sucedió lo que ya esperaba: el coche quedó muy inclinado hacia la izquierda, ya que la barra izquierda no estaba torsionada, y cedió mucha altura con el peso.

La única opción que me quedaba era torsionar la barra izquierda bajando el brazo 4cm (un diente del estriado) y probar a ver qué pasaba. El eje del brazo quedó a 41cm del borde de la aleta (visiblemente más bajo que el derecho). En esa posición, la barra encajó en el estriado y volvimos a montar las ruedas y amortiguador izquierdo para apoyar el coche en el suelo.


Yo me encargué de accionar el botón de bajada del elevador y, cuando el coche quedó apoyado, Paco me dijo que él lo veía bien. Yo no me lo creía y lo comprobé.


Efectivamente, el coche estaba aparentemente plano. Medí la altura desde el borde de la aleta al eje de las ruedas y en ambos lados era exactamente igual: 35,5cm. No me lo podía creer... Misteriosamente, a pesar de que los brazos estaban montados de diferente manera y uno quedaba más bajo que el otro, con el peso del coche todo iba a su sitio y quedaba perfectamente. Además, ambas barras poseen la misma torsión, pues se han girado un diente cada una. Buenas noticias, al fin.

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