viernes, 17 de noviembre de 2017

Montando pinzas de freno

Para montar el portapinza en la mangueta, estuve siguiendo algunas de las indicaciones que aparecen en el manual de taller.


Lo primero que tenía que hacer era montar la placa trasera, ya que va sujeta con los dos tornillos del portapinza. Así que puse un cordón de masilla en el contorno de contacto de la placa antes de montarla.


No sé exactamente para qué sirve este cordón de masilla. Supongo que cierra herméticamente esa zona y evita entrada de agua. Si estaba puesto, por algo será.

Después apliqué fijador de roscas fuerte a los tornillos grandes. En el caso de los pequeños, lo apliqué en las tuercas.


Una vez montados ambos portapinzas, decidí montar también las pinzas de freno. Lo primero era colocar las juntas de goma del interior. Las humedecí con líquido de frenos. Entraron fácilmente.


Después coloqué el fuelle guardapolvos en el pistón, ya que parecía mucho más complicado de colocar ese extremo que el de la pinza.


La verdad es que tenía su aquél colocarlo bien. Una vez puesto, mojé la superficie exterior del pistón con líquido de frenos y lo introduje en la pinza. Como ya sabía, me costó trabajo. El ajuste es tremendo, y hay que hacer bastante fuerza para introducir el pistón. Una vez que el fuelle podía colocarse en el alojamiento de la pinza, lo fijé con el anillo que trae el kit.


Ya puesto, me propuse dejar montadas las pinzas en su portapinza correspondiente. Para ello, tendría que montar también las pastillas, pero éstas no cabían en el hueco entre el pistón y el lado contrario de la pinza. Medí aproximadamente lo que ocupaban ambas pastillas junto con el disco de freno y eran unos 42mm. Así que tenía que introducir más el pistón. Me ayudé de un kit compresor de pistones que había en el taller. Busqué los útiles que pensaba que mejor se adaptarían a la pinza y fue muy sencillo introducir el pistón.


Una placa hace tope contra el borde de la pinza mientras un husillo con una placa en el extremo va presionando el pistón. De este modo, ya tenía la pinza lista para montar. Antes de eso, puse grasa específica en las zonas de deslizamiento de las pastillas y en los apoyos de las láminas flexibles para evitar chirridos. Esta grasa es extremadamente densa, muy pastosa, supongo que para evitar cualquier deslizamiento hacia las zonas de contacto entre pastillas y disco.


Según el manual, las láminas deben llevar la pestaña doblada (lateral liso) hacia el lado del disco.


Cuando ya estaba a punto de colocar los tornillos de sujeción de la pinza, me di cuenta de que no había engrasado las guías de deslizamiento... Les puse una cantidad de grasa no muy grande en toda su superficie.


Según el manual, la guía con goma va en la parte superior del portapinza y el otro, en la parte inferior. Coloqué los guardapolvos primero en el portapinzas y, una vez introducidas las guías, los enganché por el otro extremo en el alojamiento correspondiente.


Con las guías engrasadas, coloqué la pinza en su lugar. Tuve que hacer algunos malabares para mantener la mangueta sujeta y con las pastillas en su sitio, para colocar la pinza y atornillarla.


Coloqué uno de los tornillos sin fijador de roscas para mantener la pinza sujeta. Apliqué fijador de roscas medio al otro y lo apreté.


Después saqué el primer tornillo, le apliqué fijador de roscas y lo apreté. Según el manual, estos tornillos llevan un apriete de entre 3,5 y 4 kg·m, comenzando por el tornillo inferior (dato curioso), así que los apreté a 2 kg·m y, después, a 3,5 kg·m.

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